Cómo llegar: Sur de la provincia. En el centro de la provincia, cerca del Duero, Recuerda sería la vía de entrada de estos espacios y Mosarejos/Galapagares los pueblos que lo cierran por el sur. Por la SO-100 se llega a Berlanga de Duero y, desde allí, por la SO-152 hasta Recuerda. También se puede acceder a esta localidad desde el Burgo de Osma por la SO-160.

Figura de Protección: Ninguna figura de protección aparece en este espacio.

Tipología: Pequeños cañones calizos -secos- excavados por el Arroyo de la Fuente Arenaza, entre extensos bosques de sabinas.

Acceso: La única posibilidad de acercarnos a estos dos pueblos es por nuestros propios medios, ya que no existe ningún tipo de transporte público.

Dificultad: Escasa. Hay buena red de caminos y senderos que nos permitirán recorrer las diferentes propuestas.

Duración: Variable, dependiendo de nuestro interés, aunque el itinerario propuesto, recorrido de ida y vuelta puede llevarnos de 5 a 6 horas.

Época del año: La primavera y el otoño son los momentos ideales para la observación de las aves más típicas. El invierno puede deparar interesantes observaciones de aves invernantes, ligadas tanto a los roquedos como a los sabinares.

Observaciones: Se trata de una de las zonas más desconocidas de la provincia de Soria. Pueblos como Mosarejos, Galapagares, Brías, Abanco…pueblos que no están abandonados, pero casi. Los servicios existentes en los mismos, por lo tanto, son nulos.

A Sabinares de Morales. En el entorno de Morales, entre el pueblo y el río Duero, se sitúan algunos bosquetes de sabinas que han conseguido sobrevivir al empuje de los cultivos. En estos bosques podemos ver las mismas especies de aves que las ya comentada para estos espacios con anterioridad.

Nuestra recomendación pasa por la existencia del algún ejemplar fantástico de sabina. Hay una en concreto, llamada “la Pica” por los paisanos que se encuentra recogida en el Catálago de Arboles Notables de la provincia de Soria. Es una sabina de casi 15 metros de alto y 3 metros de perímetro, en buen estado de salud. Junto a ella hay algunas próximas, más pequeñas, pero de buen tamaño también. La proximidad del Duero hace que el catálogo de aves sea mucho más numeroso que el de los sabinares situados al sur.

B Hoces de Valpierle y Pradejón. En las calizas de este sector, confluyen otras pequeñas hoces creadas por el arroyo de Pradejón, el arroyo de Valpierle y el río Talegones, en su tramo final. Son arroyos largos con roquedos pequeños, pero con abundante avifauna.

Se accede por una pista en muy buen estado desde Berlanga de Duero que nos deja al borde de las dos hoces tras cruzar el río Talegones. A apenas un kilómetro de aquí se encuentra el muladar de Berlanga de Duero, pues se nota en la cantidad de ejemplares que descansan o crían aquí y en la posibilidad de observar otras especies. Aquí se observa con cierta regularidad buitre negro y se citó en 2015 águila imperial. En el conjunto de las hoces hay parejas de todas las especies de aves rupícolas que crían en Soria.

El búho real está muy presente en el entorno y ocupa ahora más rincones que hace 20 ó 30 años. No es extraño encontrarlo en zonas aparentemente poco adecuadas, valiéndose de las soledades de nuestros campos. En diciembre empiezan a cantar los machos.

El mirador natural que se forma en la carretera vieja es lugar ideal para poder ver a los buitres en sus cubiles y paredes, con sus primeras cópulas, pequeños bandos de gorriones chillones, chovas piquirrojas, a las cada vez más escasas grajillas y, con bastante suerte, detectar algún ejemplar de acentor alpino.

Desde este punto también se veía hasta hace pocos años a una pareja de águila real con uno de sus nidos situado en los roquedos cercanos. Sin embargo, esa pareja ha desaparecido ya, sin que se sepan los motivos.

Si el año es bueno de bayas podremos observar las cuatro especies de zorzal que hay en España: zorzal alirrojo, real, charlo y común.

De todos ellos solo el charlo estará todo el año en estos sabinares.

La avifauna de estos cortados rocosos coincide con la de otras rutas similares. Según vaya avanzando la primavera irán llegando los aviones roqueros, algún roquero solitario, la pareja de alimoche y el roquero rojo. En el mes de abril es frecuente ver el mirlo capiblanco. En el sabinar destacan las currucas dado que es de los lugares de Soria donde la curruca mirlona y la curruca carrasqueña presentan más altas densidades. También la curruca rabilarga es común en las zonas menos densas de sabinas y/o mezcladas con laderas de estepas y aliagas. En los últimos años se ha hecho común la curruca cabecinegra, bastante escasa en la provincia de Soria y que en esta zona mantiene uno de sus principales bastiones.

También abunda el mosquitero papialbo y como elemento de color presente en menor medida, el colirrojo real.

Sabinares y Hoces del Fuente Arenaza